Mensaje del día – 03 de marzo de 2016


Mensaje de la Pizarra de Prashanti Nilayam

OM SRI SAI RAM

Médicos de buen corazón mantienen en marcha instituciones médicas en diversos lugares, sirven a los enfermos y curan a los dolientes. De la misma manera, si en muchos sitios tuviéramos los ashrams de personajes santos, expertos en el tratamiento y cura de la «enfermedad del nacimiento y la muerte», la gente podría ser curada de los males de la ignorancia, la falsedad, la inmoralidad y la vanidad. La ignorancia produce maldad, y sólo puede ser curada por la medicina del conocimiento de Brahman (Brahma-jnana), con dosis suplementarias de drogas como paz, fortaleza y autocontrol (santhi, sama y dama), etc. En cambio, los «grandes hombres» de hoy, en pos de renombre y fama, dan a quienes acuden a ellos los medicamentos que los pacientes demandan, y las drogas de las cuales gustan. Los así llamados «grandes», por culpa de su propia debilidad y tontería, caen en la
perdición ¡aún antes de poder probar ellos mismos la dicha espiritual! La esencia sagrada tiene que ser experimentada y concienciada. Las propias necesidades egoístas tienen que ser sacrificadas.

 

Kind-hearted doctors run medical institutions here and there, serve the diseased and cure the afflicted. Similarly if we had ashrams here and there of holy personages who were experts in the treatment and cure of the ‘birth-and-death disease’, then people could be cured of the afflictions of ignorance, untruth, immorality, and self-aggrandisement. Ignorance produces wickedness, and it can be cured only by the medicine of the knowledge of Brahman (Brahma-jnana), with supplementary doses of the drugs like peacefulness, fortitude, self-control (santhi, sama, dama), etc. Instead, the ‘great men’ of today, for the sake of name and fame, give those who approach them the medicines they demand and the drugs their patients relish! The so-called ‘great’, on account of their weakness and foolishness, fall into perdition even before they taste the spiritual bliss themselves! The holy essence has to be experienced and realised. One’s selfish needs have to be
sacrificed.

— BABA